Hacer ejercicio físico en nuestra casa ha vuelto a ser popular debido a la necesidad de permanecer en nuestros hogares para hacerle frente a la pandemia de COVID-19. La opciones son muchas: desde puede usar la bicicleta fija, hacer un poco de yoga, saltar la cuerda o seguir una clase específica, por Internet, de un entrenador.
“La gente intenta encontrar una normalidad y en tiempos de estrés, es fundamental tener una estructura. Recompénsese a través del movimiento, la alimentación y el ejercicio”, dice Jennifer Noiles, directora de rendimiento para Exos en Medicina Ortopédica y Deportiva de Mayo Clinic en Rochester.
Noiles recomienda adoptar un método cauto y progresivo con la actividad física, de modo que las sesiones no se conviertan en tan solo una sucesión de ejercicios indiscriminados. Anota también que para tener éxito, se requiere un plan que incluya la motivación para obtener los mejores beneficios del deporte.
Sugerencias para continuar:
Organice sus hábitos
Por ejemplo, si los chicos de la casa se levantan a las 7:00 todas las mañanas, planifique hacer 30 minutos de ejercicio antes de que ellos se levanten. Si su equipo de trabajo hace una conferencia telefónica diaria al mediodía, piense en las metas que desea alcanzar para antes o después de la llamada.
Busque un lugar definido para la sesión
No todos cuentan con un espacio físico aparte que pueda “convertirse” en un gimnasio hogareño y doméstico, pero piense en generar un espacio en el sótano o tal vez en el garaje.
Para que un hábito se haga regular, debe ser fácil, obvio y disfrutable
Personalice la rutina de ejercicios a sus capacidades.
Independientemente de si el ejercicio es algo nuevo en su vida o de que vuelva a hacerlo tras haberse recuperado de alguna lesión o de que sea un atleta, siempre elija la rutina de ejercicios conveniente y apropiada para su situación. No se olvide de precalentar antes y de hacer estiramientos luego de completar la rutina, para aflojar y prevenir lesiones.
Confíe en los expertos
Eso le evitará hacer conjeturas sobre su estado físico y el programa de bienestar adecuado. Busque, por ejemplo en redes o sitios web profesionales que ofrezcan clases de gimnasia o yoga, más o menos intensas, dictadas por expertos, a través de redes como Instagram o Facebook. Y considere retribuirles económicamente a estas personas por su aporte y trabajo.
Reconsidere el significado del “éxito”
Antes de la pandemia, posiblemente juzgaba su éxito y logros por el peso que levantaba o los metros que remaba, o la distancia corrida en la sesión de runnig. Pero ahora su meta podría ser el desarrollar nuevos hábitos para hacer ejercicio en un ambiente completamente distinto. “Para que un hábito tenga éxito, debe ser fácil, obvio y algo que uno disfrute”, concluyó Noiles.
