- El temor al dolor, a la pérdida del deseo sexual y a quedar impotentes son algunos de los mitos en torno a esta sencilla intervención quirúrgica que está siendo cada vez más demandada.
- Por qué este método anticonceptivo se está volviendo cada vez más popular, incluso entre hombres jóvenes. Por la gran demanda, en algunos centros de salud hay lista de espera de 6 a 12 meses.
Dspués de que nació Eloísa –la tercera–, Jairo y Sol decidieron que hasta ahí estaban bien. “No recuerdo cómo surgió pero lo charlamos con mi compañera y decidimos que era una buena opción”, recuerda Jairo para PERFIL. “Así ella no tenía que tomar pastillas ni necesitábamos preservativos. Hice la consulta con un urólogo, me dio turno y fue rápido y fácil: anestesia local, un ratito y te vas. Y lo cubrió la obra social. Antes de hacerlo nos habían preguntado si estábamos seguros, por el tema de la reversibilidad pero ya pasaron dos años y estamos contentos con esta elección”.
La experiencia de Jairo y Sol no es todavía tan común pero se está volviendo tendencia, como también lo muestran varios personajes que hicieron pública su decisión, incluyendo a Pablo Granados, Pedro Alfonso, Beto Casella y el actor George Clooney.
Las consultas de jóvenes entre 18 y 25 años aumentaron en los dos últimos años
“Las consultas por este tema se incrementaron significativamente en los dos últimos años sobre todo jóvenes de 18 a 25 años”, le contó a PERFIL el urólogo Mariano Cohen, jefe de la Sección Andrología en el Hospital de Clínicas de la UBA. Y también aumentaron las cirugías: de hecho, su servicio tiene tanta demanda que la lista de espera para concretarlas es de entre 6 y 12 meses. Y para poder mensurar el crecimiento explicó que “en nuestra sección del hospital, solo durante 2019, hicimos entre 10 y 20 procedimientos mensuales. En contraposición, en 2016 –apenas tres años antes– hicimos 20 en todo el año. Claramente se nota un cambio en la mentalidad de la población”.
Según este urólogo esto no solo ocurre en el Clínicas ya que los expertos ven lo mismo en otros servicios hospitalarios y en consultorios privados.
“Es una demanda que escuchamos con mayor frecuencia. De hecho se han publicado varios artículos científicos locales que dan cuenta de esta tendencia”, confirmó la doctora María Elisa Moltoni, vicepresidenta de la Asociación Médica Argentina de Anticoncepción (AMAdA). Y explicó que se están viendo cambios ya que ahora el hombre también se interesa en participar de la anticoncepción.
Aumento de las vasectomías: todos los
detalles de esta intervención quirúrgica
Por su parte, Cohen –que optó por hacerse esta cirugía hace años– comentó otros detalles sobre este procedimiento. “Nuestro hospital es uno de los lugares donde se hacen vasectomías a todos los que la requieran, mientras que en otras instituciones se le sugiere a quien tenga paternidad previa antes de optar por un método que con el paso de los años se vuelve irreversible. Pero al consultorio llegan cada vez más varones jóvenes sin hijos, que, durante la consulta inicial, cuentan que la paternidad no es una opción que les interese. O que, llegado el caso, considerarían adoptar. Por eso ahora eligen una vasectomía”.
Detalles de como se hace la vasectomía
Según la web de AMAdA “la vasectomía es uno de los métodos anticonceptivos más eficaces, con una efectividad cercana al 100%”. Suele hacerse en forma ambulatoria y al día siguiente los pacientes pueden volver a trabajar. Realizarla no afecta el aspecto ni la textura del semen y no se modifica la sensación de eyacular (el orgasmo) ni perjudica la erección. “Es además”, según la ginecóloga María Laura Lovisolo, “un método cuya confiabilidad no depende del error en el modo de uso ni de que el hombre recuerde utilizarlo, además de que es permanente”.
El advenimiento de la vasectomía como un método de contracepción quirúrgica masculina recomendado en Argentina es relativamente reciente: puede hacerse en forma oficial recién desde 2006, tras un cambio legislativo.
En otros países es común desde hace muchos años. Según un artículo de la revista de AMAdA, “en Estados Unidos, (la vasectomía) es hoy la cirugía urológica más frecuente y se registran 600 mil casos por año”.
Un punto llamativo es que si bien se la considera definitiva, de ser necesario –y si no transcurrieron diez años– puede revertirse en un quirófano. “En el mundo la tasa de reversión ronda entre el 10 y el 20% de los casos”, contó Cohen.
Finalmente el experto destacó otra clave: “Obviamente no protege del contagio de enfermedades de transmisión sexual. En ese tema las parejas tienen que seguir usando un método tradicional de barrera”.
¿Cuando es una opción?
Se trata de una opción segura, simple y rápida, que tiene muy pocos efectos adversos y bajísima probabilidad de complicaciones posteriores. Se suele concretar en forma ambulatoria y con sedación o anestesia local. “Sería una excelente opción para parejas que no quieren más embarazos y que requieren una seguridad anticonceptiva elevada. O que otros métodos tradicionales tengan alguna contraindicación particular, especialmente al pensar entre las opciones no hormonales. También hay que pensarlo como algo irreversible, si bien hay casos en que hay una posibilidad de revertirla. Pero no en todos”, explica Moltoni. Y recuerda que en dichas situaciones, y previendo algún cambio de opinión a futuro, el hombre que se realizará una vasectomía tiene la opción de criocongelar semen para, eventualmente a futuro, usarlo –por ejemplo– en una fecundación asistida. El grupo que la elige en forma mayoritaria son parejas, que ya han paternado y rondan entre los 40 y 50 años de edad. Pero un 10% son varones jóvenes que tienen la decisión de no ser padres.