Dos investigadoras de la Universitat Jaume I de Castellón repasaron 1.897 papers científicos sobre los efectos perjudiciales y beneficiosos derivados del uso del chupete en recién nacidos y lactantes.
El uso del chupete se ha relacionado con la aparición de malformaciones bucodentales, con un abandono precoz de la lactancia materna, la aparición de otitis media, el mantenimiento del hábito de succión digital y una disminución en la producción de los sonidos del habla, así como la instauración del hábito tabáquico en la adolescencia y adultez.
En cuanto a los efectos beneficiosos asociados a su uso, figura el factor protector frente al síndrome de muerte súbita del lactante durante el sueño y la aparición de sobrepeso y obesidad en la adolescencia, la analgesia producida durante procedimientos o situaciones estresantes y la estimulación del reflejo de succión en situaciones en las que este se encuentra poco desarrollado.
Desirée Mena y Jennifer Sánchez, de la Unidad Predepartamental de Enfermería de la Universitat Jaume I de Castellón (UJI) han publicado un estudio en la revista Rol de Enfermería en el que revisan un total de 1.897 artículos científicos que recogen ambas facetas del chupete en recién nacidos y lactantes.
Ventajas y desventajas
En caso de que se opte por la lactancia materna, se sugiere no utilizar el chupete, pues está relacionado con la dificultad en su instauración y el destete precoz. Por otro lado, para evitar problemas en la dentición, concretamente, malformaciones bucodentales, se recomienda su uso a partir de los seis meses de edad. Sin embargo, también se relaciona, sobre todo a partir de esta edad, con la aparición de otitis media.
Otra de las razones por las que se desaconseja es por aparecer su uso relacionado con una persistente succión digital en la infancia, el inicio del hábito tabáquico en la adolescencia y adultez y con una disminución en la producción del sonido del habla.
La investigación señala como recomendable el uso del chupete en el caso de que el bebé no haya desarrollado el reflejo de succión nutritiva, ya que puede utilizarse para estimularlo. También se recomienda para calmar al bebé en situaciones estresantes o dolorosas.
Con este fin, explica Jennifer Sánchez, “no se desaconseja la utilización conjunta de sacarosa, aunque por motivos nutricionales no se recomienda su uso; no obstante, siempre sería mejor como primera opción la lactancia materna si esta estuviera disponible”. Además, se recomienda el uso del chupete durante el sueño para evitar la aparición del síndrome de muerte súbita del lactante.
En el caso de utilizar chupete, la recomendación es lavarlo con una solución de clorhexidina acuosa al 0,12% o sumergirlo en agua hirviendo. Además, se aconseja la realización de revisiones dentales periódicas para vigilar el crecimiento de la dentición temporal y detectar la aparición de malformaciones. En el caso de que se lleve a cabo lactancia, el estudio señala que es conveniente realizar visitas periódicas con la matrona o enfermera pediátrica para que la supervise con el fin de poder detectar precozmente posibles problemas derivados del uso del chupete.