Con una multitudinaria presentación ante un amplio grupo de médicos el laboratoroio GSK acaba de lanzar en Argentina una vacuna contra el Virus Sincicial Respiratorio (VSR). La misma está apuntadada a prevenir infecciones respiratorias en adultos mayores de 60 años. Vale recordar que el VSR Afecta a todos, pero sobre todo tiene mayor importancia en los “extremos” de la vida: bebés y menores de dos años y adultos mayores.

Se estima que en Argentina se registran alrededor de 14.000 hospitalizaciones anuales en mayores de veinte años a consecuencia de las infecciones por el VSR.

Durante la presentación oficial los expertos en inmunologia recordaron que “esta enfermedad, que para gran parte de la población se manifiesta apenas como un resfrío, suele está asociada a la bronquiolitis y otras afecciones respiratorias de niños. Pero es mucho menos conocido que, además, también puede tener consecuencias graves en personas mayores, particularmente sobre aquellos con comorbilidades respiratorias o cardíacas.

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Y es una típica infección que se transmite con facilidad dentro de las familias, especialmente en los meses invernales, donde hay poca ventilación y mucha convivencia en espacios cerrados.

Tal como ocurre con otras enfermedades respiratorias, el VSR se contagia a través de las gotas expulsadas al toser y respirar. Dado que sus partículas pueden permanecer varias horas en las superficies, su prevención recomendada implica “usar y desechar pañuelos descartables, lavarse las manos frecuentemente, escudarse al toser o estornudar y ventilar muy bien los ambientes”, recoordó el doctor Pablo Bonvehí , jefe de la sección de Infectología del CEMIC, miembro del departamento científico de la Fundación Vacunar e integrante de la Comisión de Vacunas de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI).

Algo parecido destacó Diego Litewka, jefe de Neumonología del Hospital Fernández, “una característica del VSR es que las personas infectadas suelen diseminar el virus entre tres y ocho días luego del comienzo de los síntomas”.

Síntomas del VSR

En la mayoría de los casos, el VSR manifiesta síntomas leves, como un resfriado prolongado (se suele decir que los síntomas son inespecíficos y el tratamiento disponible es sólo de sostén). Pero esta patología ocasionalmente puede afectar seriamente a bebés, niños pequeños y adultos mayores.

En este grupo -quienes tienen más de 60 años- el virus puede derivar en complicaciones a causa del deterioro de las defensas del organismo como producto del envejecimiento, también llamado inmunosenescencia.

El impacto del Virus Sincicial Respiratorio en las poblaciones vulnerable

Entre las complicaciones que puede producir el VSR se encuentran las infecciones del tracto respiratorio inferior, como la neumonía. “Puede dejar secuelas respiratorias que dificultan el funcionamiento pulmonar de las personas”, recordó Bonvehí. También puede exacerbar otras enfermedades crónicas presentes en el adulto, como EPOC, asma e insuficiencia cardíaca (ICC)2 y hasta provocar la muerte.

Durante la temporada invernal, su cuadro de diagnóstico toma mayor complejidad dado que “sus síntomas son clínicamente indistinguibles de otras infecciones respiratorias”, afirma Litewka. “Es muy difícil diferenciarlo de la influenza o el COVID-19 porque pueden tener características similares, como fiebre, tos e inclusive congestión nasal”, agrega Bonvehí.

La afección también puede generar disminución del apetito, estornudos y sibilancias.

Que hacer

Ante los primeros indicios es importante quedarse en casa y llamar a un médico de forma inmediata, ya que es necesario analizar los eventuales riesgos que podrían acontecer teniendo en cuenta las comorbilidades que atraviesa la persona4. Hay que considerar que éstas pueden agravar el cuadro y provocar consecuencias críticas que afectarán la calidad de vida a largo plazo o incluso de forma irreversible.

En los países desarrollados la tasa de mortalidad intrahospitalaria ronda entre el 6% y el 8%6 y en los individuos que tienen más de 75 años este porcentaje se eleva al 33%7. Por otra parte, tal como ha señalado el Centro para el Control de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC), el 94% de los adultos hospitalizados en ese país a causa de este virus padecía afecciones médicas comórbidas subyacentes. En consecuencia, se registran anualmente más de 470.000 hospitalizaciones y 33.000 muertes producto de complicaciones derivadas de otras afecciones.

Sin embargo, “al ser una enfermedad subdiagnosticada, por lo menos acá no hay datos epidemiológicos precisos, especialmente en adultos”, explica Litewka. “Justamente, por tratarse de una patología no reconocida, no hay conciencia de la importancia de su prevención”.

Tripledemia: gripe, Covid y VSR

Desde 2021 los especialistas comenzaron a denominar la temporada invernal como “tripledemia”, ya que hubo un aumento de casos de influenza, COVID-19 y VSR. Estas enfermedades respiratorias en adultos de mayor edad o con enfermedades crónicas pueden dejar secuelas permanentes y llegar a ser mortales. De ahí que sea fundamental vacunarse, no solo para mitigar sus efectos negativos, sino para fortalecer al sistema inmunológico frente a otras afecciones.

Una vacuna destinada a proteger a los adultos mayores

La nueva vacuna contra el virus sincicial respiratorio está indicada para mayores de 60 años, especialmente aquellos que tienen comorbilidades, aunque por el momento no fue incorporada al calendario de vacunación local. Es una vacuna segura y se probó en alrededor de 25 mil personas de más de 60 años, en un estudio multicéntrico.

Según los estudios clínicos realizados, tiene una eficacia para la prevención de la infección respiratoria baja causada por los dos tipos de VSR circulantes (VSR A y VSR B), del 82,6% y del 94,6% en adultos con enfermedades crónicas.

Su aplicación previene particularmente cuadros más complejos en la población más vulnerable, como son los adultos mayores, que históricamente no han recibido la atención suficiente respecto del daño que puede producir el virus. “La inmunidad que genera la infección es débil, por lo que las personas que ya padecieron la enfermedad están expuestas a volver a infectarse. La vacunación, en cambio, da una protección mucho mayor”, dijo Litewka.

Esta inmunización fue aprobada por la FDA en mayo del 2023. Y también se le dio el OK en Europa, Australia y Brasil. De hecho casi una decena de países ya la incorporaron a sus respectivos calendarios de vacunación nacional.

El costo de la vacuna, que por ahora no está cubierta por la seguridad social ni las prepagas de la Argentina, ronda los $265 mil.

Enrique Garabetyan